¡Por la Merced que es nuestra gloria, al servicio de los cautivos de nuestro tiempo!
A todos los religiosos de la Orden y Familia Mercedaria:
“Y por eso Él es el mediador de un nuevo pacto, a fin de que habiendo tenido lugar una muerte para la redención de las transgresiones bajo el primer pacto, los que han sido llamados reciban la promesa de la herencia” (Hb 9,15)
Mis queridos hermanos:
Después de haber prácticamente terminado la Visita Canónica General de la Provincia Mercedaria de México, les envío mi cordial saludo con motivo de la Solemnidad del Santísimo Redentor, maestro y modelo de nuestra consagración religiosa y misión redentora: “Los mercedarios tenemos como maestro y modelo a Cristo Redentor que con su muerte nos ha liberado de toda esclavitud y estamos dispuestos a seguirlo sacrificando hasta la propia vida en el ejercicio del ministerio redentor” (COM 6) .
Conforme transcurre el tiempo, es de suponer que la identificación con el Señor sea cada vez mayor y mejor. Que nuestro estilo de vida sea cada vez más semejante al ser, pensar y actuar de Jesús; de tal manera que el pueblo de Dios se sorprenda por nuestra forma de hacerlo presente místicamente en medio del mundo, en medio de la sociedad.
Al ir recorriendo las comunidades locales de las Provincias de nuestra Orden, he venido agradeciendo en primer lugar, el testimonio de fidelidad a Cristo redentor realizando con generosa entrega las diferentes obras de misericordia, especialmente visitando y liberando a quienes están privados de libertad. Qué gratificante es mirar a la mayoría de los religiosos empeñados en cultivar la vida espiritual a través de la oración personal y comunitaria, que luego se traduce en la construcción de relaciones fraternas robustas.
Es muy importante asegurar que nuestros jóvenes tengan una sólida identificación con los principios y valores de nuestra vida religiosa mercedaria, sobre todo, una gran identificación con Cristo Redentor, con nuestra Madre la Virgen María de la Merced y con nuestro padre y fundador San Pedro Nolasco, a fin de que realicen lo mejor posible la misión redentora.
Que Cristo Redentor nos siga colmando de su gracia divina, para que podamos seguir realizando con generosidad la misión redentora. ¡Feliz solemnidad de Cristo Redentor!
Puebla de Los Ángeles, Méx. a. 9 de julio de 2025, a los 806 años de la fundación de la Orden.
Fraternalmente en Cristo Redentor:
Fr. Leoncio Osvaldo Vivar Martínez, O. de M.
Maestro General de la Orden de la Merced
