Las actividades del 24 de septiembre pasado, a las 19 horas, las encabezó aquí, el Vicario Pastoral de la Diócesis San José de Temuco, presbítero Rogelio Henríquez, por expreso encargo del Obispo Héctor Vargas Bastidas, que se encontraba en Punta Arenas.
DESDE CLUB HÍPICO
El padre Henríquez, junto a los frailes mercedarios, Rodrigo Aguilar Gómez , Superior de la Comunidad del Sur; Juan Pedro Díaz, que regresa a su misión en Angola, próximamente; al párroco del Sagrado Corazón de Jesús de Traiguén, presbítero Luis Barrientos Riquelme y numerosos acompañantes portando la imagen de María de Mercedes, iniciaron la procesión, desde la Capilla San Ramón Nonato, en calle Bandera, de la Población Club Hípico, tras la oración de envío del rector del plantel institutano.
Encabezada por la Banda de Guerra del Colegio Instituto Victoria, la columna, animada por los diáconos Patricio Benavente Silva y Roberto Poveda Espinoza, rumbeó por diversas arterias, para detenerse en Avenida Dartnell, frente al Hogar San Pedro Armengol, a cargo de las religiosas mercedarias y tener allí un momento de reflexión.
LLEGA A PARROQUIA
Ya en la penumbra, los fieles arribaron hasta la Parroquia de Nuestra Señora de La Merced, donde esperaba gran cantidad de feligreses para dar inicio al servicio Eucarístico.
Los citados religiosos junto a sus hermanos del Decanato de Victoria, Darío Fuentes Cifuentes, decano y párroco de Perquenco; Francisco Millán Lincopi, de Ercilla; Jorge Vidal Bustos, de Lautaro; Enrique Catalán Sepúlveda, de Selva Oscura; y René Riquelme Fuentes, del Sagrado Corazón de Jesús de Victoria.
En el inicio, el sacerdote representante de monseñor Vargas invitó a los presentes, a sentirse Iglesia Viva…”Iglesia que comparte el gozo de tener una Madre, a quien amamos y queremos tanto, expresamos este cariño, la acogemos, la recibimos en nuestra casa, como el discípulo del Evangelio. Es el gran desafío que vamos a tener. Con ella, queremos aprender a ser una Iglesia, Siempre Servidora, humilde, sencilla; que acoge siempre la Palabra de Vida”, invitando a preparar el corazón, para recibir los dones tan grandes de la Fe, que era Jesucristo mismo.
RENUEVAN PROMESAS
El programa en la Iglesia, estuvo a cargo de los animadores, Ana María Lagos Schifferli y Alberto Sanhueza Pirce, y tras las lecturas del día, el salmo “El Señor ha Tenido Misericordia de su Pueblo” y el Evangelio según San Juan “Hijo, Aquí Tienes a Tu Madre”, hubo Renovación de Promesas de los religiosos Aguilar y Díaz; de las religiosas, sor Gladys González, sor Dolores Hinojosa, sor Clara Muñoz y sor Cecilia Sáez. Asimismo, la Renovación de Juramento de los miembros de la Fraternidad Laical Mercedaria, continuando con la Oración Universal.
Durante la Procesión de Ofrendas se llevó al Altar, el Estandarte con el escudo de La Merced; el mantel que lo cubre, prolijamente confeccionado por Mónica Díaz de la Fuente, quien lo portó junto a su hija.
Representantes de la Comunidad Mapuche de Manzanaco presentaron productos típicos del campo, concluyendo la Santa Misa con la Sagrada Comunión, el mensaje final del celebrante y párroco anfitrión, invitando la comunidad mercedaria a un café con torta, en interior de la casa parroquial.
Agradecemos al corresponsal del Obispado de Temuco, Manuel Burgos, periodista, de quien hemos compartido el texto y fotografías de la celebración.