En el marco de la celebración de la inauguración y bendición del nuevo pabellón del Colegio Instituto Victoria, la comunidad institutana se reunió la noche del jueves 31 de marzo para homenajear a un matrimonio de funcionarios por sus años de servicio y entrega a la comunidad educativa, se trata de Ricardo Siegmund y Jeannette Sepúlveda.
En sus palabras de agradecimiento el rector, fray Carlos Ortega, resaltó la historia de Ricardo Siegmund, “quien sirvió al colegio durante 50 años, más del 50 por ciento de vida del Instituto él ha estado presente desde la administración, de la inspectoría y la Junaeb, entre tantas otras funciones que visibilizaron su dedicación y amor al colegio; además de una vida consagrada a la Orden de la Merced, al Proyecto Educativo Mercedario del cual es uno de los miembros de esta comunidad que participó en su elaboración”.
El padre Carlos anunció que se han construido 2 salas, “una de atención de público y una sala donde sesiona el Consejo Directivo y queremos que lleve su nombre: “Sala Ricardo Siegmund” y la maquina de escribir que durante décadas lo acompañó en tantos oficios, contratos, y documentos que redactó estará presente como recuerdo de su aporte a la vida del colegio”. Posteriormente, el padre Carlos entregó un presente a Ricardo.
El superior provincial, fray Mario Salas Becerra, dirigió unas palabras a Ricardo Siegmund y agradeció el compromiso que ha tenido con la comunidad educativa y con la Provincia Mercedaria, entregó además un regalo de reconocimiento por su larga trayectoria laboral.
Posteriomente, se realizó un homenaje a Jeannette Sepúlveda, quien este año se acoge a retiro luego de más de 40 años de docencia. El padre rector, fray Carlos Ortega, resaltó que “no solo es una transmisora de conocimientos, sino ser aquella docente que veía en cada alumno o alumna un hijo o una hija, reflejo de compromiso y vocación que es para quienes se están iniciando en pedagogía pueden encontrar en usted un testimonio vivo.
Al igual que don Ricardo, su esposo, el amor a la Orden de la Merced, es una característica que ambos poseen, la devoción a la Virgen de la Merced y esa disponibilidad a las cosas del colegio y de la parroquia es admirable y se agradecen de corazón”.
Finalizó sus palabras agradeciendo a “Dios por la vida de nuestra tía Jeannette, por su vocación docente y por ser parte de la comunidad educativa, la grandeza de las instituciones la hacen las personas y su calidad humana y entrega docente, ha exaltado la vida del Instituto Victoria”.
Se le entregó un presente a Jeannette y el reconocimiento de toda la comunidad del Colegio Instituto Victoria.
En la oportunidad los representantes de los colegios mercedarios de Chile, entregaron unos presentes para implementar el nuevo pabellón san Ramón Nonato.
