Santiago, 01 de septiembre de 2021
Estimada Familia Mercedaria en Chile y en Angola:
En primer lugar, vaya para todos un saludo fraterno, deseando que María Nuestra Madre de la Merced los acompañe en todos sus proyectos.
Al iniciar este mes de septiembre, nuestros corazones se regocijan por la celebración el próximo 24 de septiembre, día de la solemnidad de nuestra Madre de la Merced; inspiradora de toda nuestra labor redentora en Chile y en Angola. Celebrar a nuestra Madre es motivo para reconocernos hermanos, pues compartimos la misma pasión por la libertad, nos esforzamos para anunciarla y proponerla en cada una de nuestras obras; somos herederos de esa familia mercedaria de antaño. Son más de ochocientos años de Amor Redentor, que brota desde ese profundo amor a María de la Merced y de sentirnos enviados por Ella. San Pedro Nolasco, nuestro padre, tuvo muy claro que María, la Madre del Señor, era la verdadera protagonista de toda nuestra labor redentora. En los momentos más complejos de nuestra historia como Orden de la Merced, ella nos ha tomado de su mano y ha permitido que sus hijos sigan caminando la ruta de la redención. Hoy, nuestra Madre, sigue acompañándonos para ir descubriendo la voluntad de Dios en cada uno de los acontecimientos que misteriosamente se nos van presentando.
En este mes de mercedes que estamos iniciando y que nos prepara para la fiesta del próximo 24 de septiembre, los quiero invitar a que abramos nuestro corazón y nos dejemos tocar por Ella que conduce la historia de esta comunidad. Las actuales condiciones sanitarias, más favorables ciertamente, nos posibilitarán encontrarnos de manera presencial, tomando los debidos resguardos que nos solicita la autoridad. Que sea una hermosa oportunidad de volver a celebrar como comunidad, poniendo en el altar las intenciones de aquellos que ya partieron a causa de esta pandemia, como también el sufrimiento de tantos en diversas partes del mundo.
Estimados hermanos, volvamos con más fuerza a poner en el centro de nuestro quehacer pastoral a Jesús, a los mas pequeños y vulnerables. Que María de la Merced, madre de los cautivos y de los redentores, vuelva su mirada amorosa hacia ese mundo que sufre. Dejémonos contagiar por el amor, no por el virus. Las raíces de nuestra vida están en Cristo, en Él está la fuerza para enfrentar los difíciles problemas que nos esperan después de la crisis, en Él esta el modelo de cercanía, amor y servicio. 1
Como Provincia Mercedaria de Chile, hemos preparado un programa especial para celebrar a nuestra Madre con sentido de familia Mercedaria presente en Chile y Angola. Gracias a las enormes posibilidades que nos brinda Internet, se compartirán distintas iniciativas: La transmisión de las eucaristías de las diversas comunidades de la provincia, reflexiones marianas de nuestros laicos y religiosos, entre otras. Todo el programa estará en las distintas redes sociales y nuestro sitio web www.mercedarios.cl
Paso a detallar algunas:
Estimados hermanos, quiero concluir este saludo haciendo nuestras las peticiones2 de nuestra Orden, lo hacemos por intercesión de María Nuestra Madre de la Merced, verdadera inspiradora de nuestra obra redentora.
¡Felices Fiestas Mercedarias…!
Con afecto.
Fr. Mario Salas Becerra O. de M.
Superior Provincial
1 SS. Francisco, “Comunión y esperanza", (LEV) del Dicasterio para la Comunicación, 2020
2 Cfr. La Merced en la Liturgia 2020- 2021
